Na Comerma de Sa Garita es un tipo de monumento único en el panorama de la arqueología menorquina y balear. Forma parte de la zona arqueológica de Torre d'en Galmés y está formado por un gran recinto de planta absidal, cubierto por grandes losas, que se abre a un gran espacio rodeado por un muro ciclópeo, que originariamente estaría a cielo abierto.
Horario: Sábados de 9 a 19 h.
Precio: Gratuito
Visitable: Si
Acceso: Se llega por la carretera de Alaior a Son Bou. En el punto kilométrico 2,2 se gira a la izquierda por un camino rural y se recorren 1,3 kilómetros hasta el poblado de Torre d'en Galmés. Hay que dejar el coche y bajar a pie unos 1.000 m por el camino rural de Sa Torre Nova, hasta un portillo que da paso a la parcela donde se encuentra na Comerma de Sa Garita y el sepulcro megalítico de ses Roques Llises .
Aparcamiento: En Torre d’en Galmés
Visitas guiadas: Hay carteles informativos
Contacto:
Servicios: No
Acceso a personas con movilidad reducida: No
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Periodo talayótico final
El edificio consta de dos partes bien diferenciadas: un recinto porticado en el norte y un patio que se adosa al sur.
El edificio porticado tiene planta absidal irregular, delimitado por un muro de doble paramento. El muro, en el paramento exterior, llega a conservar hasta 2 m de altura. Su interior está dividido por una serie de columnas arquitravada que formarían una retícula de cinco líneas orientadas norte-sur y tres orientadas este-oeste. Actualmente se conservan 10 columnas y 6 losas de la cubierta, pero sería posible la reconstrucción casi total del edificio, ya que los materiales originales están caídos en el suelo. En este recinto destaca, sobre todo, una "columna" situada en el ángulo noroeste del recinto porticado, que por la forma recuerda a una taula, pero no sabemos qué funcionalidad podía tener. A este edificio arquitrabado se adosa un gran patio a cielo abierto, de unos 270 m2.
Por la tipología de construcción parece que se ha de adscribir al periodo talayótico final, aunque el hecho de que no haya sido objeto de ninguna excavación arqueológica no lo permite afirmar claramente. También se desconoce la funcionalidad de este edificio, porque como no tenemos otro referente y no conocemos el interior ni el material que contiene, no podemos saber para qué lo utilizaron (almacén, edificio religioso, etc ...) por lo tanto, la excavación de esta construcción es, hoy en día, uno de los grandes retos de la arqueología de Menorca.